viernes, 29 de agosto de 2008

El extraño caso del 'hombre árbol' indonesio





Una deficiencia en su sistema inmunológico le ha hecho desarrollar raíces, como si de un árbol se tratara.
Padece el virus del papiloma humano, y un doctor estadounidense asegura que en seis meses podrá tener una vida más normal.
Su cuerpo no será como antes, pero podrá usar las manos.
Dede se convirtió en el pescador más particular de toda Indonesia en su adolescencia, cuando tuvo un accidente y se produjo unos cortes en la rodilla.
No podía llevar a cabo las tareas domésticas, dejó de trabajar y fue abandonado por su mujer
Este hecho, a priori nada extraordinario, fue un punto de inflexión en su vida. Dede, que ahora tiene 35 años, vio cómo de su cuerpo empezaban a brotar unas extrañas raíces, como si de un árbol se tratara, según publica el Telegraph.
No podía llevar a cabo las tareas domésticas, dejó de trabajar y fue abandonado por su mujer, viéndose obligado a educar a sus hijos inmerso en la pobreza, resignado a malvivir con su enfermedad.
Sin embargo, un experto dermatólogo estadounidense ha volado hasta la localidad en la que vive Dede, al sur de Yakarta, y le ha propuesto un tratamiento que podría cambiar su vida.
El virus del papiloma humano
El doctor Anthony Gaspari, de la Universidad de Maryland, concluyó, después de realizarle unas pruebas, que la enfermedad del joven indonesio se debía al virus del papiloma humano, una infección relativamente común que suele causar pequeñas verrugas en las personas que la sufren.

En seis meses, podrá vivir una vida más normalEl problema es que Dede tiene un extraño defecto genético en su sistema inmunológico por el que su cuerpo no desarrolla las defensas ante el virus. "La probabilidad de tener su deficiencia es menos de una entre un millón", reconocía el doctor Gaspari.

"En seis meses, podrá vivir una vida más normal", asegura el doctor. Gaspari ha dejado claro que su cuerpo no volverá a ser como antes, pero que sí podrá usar las manos.
El doctor estadounidense conoció el caso de Dede gracias a un reportaje de Discovery Channel. Hasta ahora, la única fuente de ingresos del indonesio era una especie de circo en el que se enroló poco tiempo después de desarrollar la enfermedad.